1º – Pelar la piña natural y trocearla en dados de 1,cm de lado y reservar. Cortar el jamón en forma de virutas y reservar.
2º – Gelatina: colocar las hojas de gelatina en un cuenco de agua fría y dejarlas durante 10 minutos. Mientras, triturar la pulpa de piña con el caldo de jamón. A continuación se unen los tres ingredientes (hojas, caldo y pulpa) y se remueven hasta que estén ligados. A continuación se vierte la mezcla en un molde (una cubitera, por ejemplo) y se deja en la nevera durante una hora y media.
3º – Servir la gelatina rodeada de las virutas, y éstas a su vez rodeadas de los dados de piña. Maridar con rosados afrutados o blancos con crianza.